Ceremonia religiosa:
UN SI eterno ante
DIOS
El corazón del
GRAN DÍA
Es el momento sagrado donde los novios se entregan por completo el uno al otro, frente a Dios, sus familias y seres más queridos.
MIRADAS
Emocionadas
La novia aparece, vestida de blanco, tomada del brazo de sus padres. Sus pasos hacia el altar son acompañados por miradas emocionadas, suspiros contenidos…
LAGRIMAS Sinceras
En muchos casos, lágrimas sinceras del novio al verla por primera vez en su máximo esplendor.
CONCENTIMIENTO
ante Dios
El consentimiento se da con palabras profundas, miradas que lo dicen todo, y una conexión que trasciende lo visible. Es un momento donde el tiempo parece detenerse: el eco de las promesas, el brillo de las argollas, la bendición del sacerdote... cada gesto se vuelve eterno.
Y cuando al fin se dan el "sí", la alegría se desborda. La salida de la iglesia se convierte en una celebración: los novios levantan el ramo, se dan un beso lleno de emoción mientras los invitados aplauden, lanzan pétalos y capturan el instante con sonrisas cómplices.
EL INICIO de una unión
bendecida
Cobertura COMPLETA
de bodas
